La profesora de pasarela del Miss Venezuela, Giselle Reyes, llega a Maracaibo con un nuevo reto profesional bajo sus brazos: crear un centro de belleza integral en la capital zuliana.Cuenta con 28 años de experiencia en las pasarelas, de los que 17 han sido de la mano de Osmel Sousa en la Quinta Venezuela.Hace un año le confesó a PANORAMA que quería abrir una “universidad de la belleza” en Maracaibo, y ayer finiquitaba detalles con la modelo zuliana Adriana Vasini, Miss Venezuela Mundo 2010, sobre su proyecto en el que ella estaría incluida para dictar talleres de pasarela.
—Se cumple un sueño más para Giselle, ¿cuántas esperanzas guarda con este nuevo centro integral?
—Muchas. Para ser sincera fue el año pasado cuando decidí que quería preparar a las chicas de Maracaibo porque son bellísimas. Tenía muchísimos años sin visitar la capital zuliana y regresé en el 2010 por el concurso del Miss Venezuela y quedé fascinada.—Obviamente en el Miss Venezuela ha tenido contactos con modelos zulianas, ¿guarda el recuerdo de una en especial?
—De muchas, pero Patricia Fuenmayor y Adriana Vasini son inigualables. Patricia es una de mis mejores amigas y Vasini tiene una de las pasarelas más impecables y hermosas que he visto, de hecho, a Vasini me la robo para la academia en un algunos talleres específicos y su mamá, Pilar Sánchez de Vasini, realizará seminarios de protocolo y etiqueta.—Cuenta con un as bajo la manga, un currículum del Miss Venezuela, ¿la favorece como empresaria?
—Yo siempre he confiado en mi talento, con o sin el currículum del Miss Venezuela, recuerda que cuando empecé a trabajar con Osmel ya Giselle Reyes tenía una trayectoria de 11 años. No quisiera que me vieran en el Zulia como en una competencia en escuelas de modelaje ni nada por el estilo. Vengo a preparar a las mujeres zulianas, desde los 4 años hasta personas de la tercera edad que quieran cambiar su imagen. Mi centro de belleza no busca misses en el Zulia.—Pero aunque no lo quiera muchas la ven como una fuerte competencia....
—Pero no es lo que busco. Te confieso que no hice ni siquiera un estudio de mercado para pensar en mi escuela en Maracaibo. Lo decidí por pura observación del talento nato de aquí. En mi centro las modelos profesionales, por ejemplo, deben pasar un curso de cuatro meses, no tengo la menor idea de cómo es en otras escuelas.—¿Cómo es ese antes y después de esta preparación con usted?
—Es un enorme avance. Yo tengo a muchas niñas que llegan incluso a mi academia en Caracas remitidas por psicólogos.El modelaje de alguna manera sube el autoestima y esto me anima porque no lo veo como un simple trabajo que busca modificar una imagen, ésto va más allá. Quiero cambiar formas de pensar y conceptos de su propio cuerpo. Es la premisa de mi academia.
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